La República Checa ratifica finalmente el Tratado de Lisboa

El presidente checo Vaclav Klaus anunció este martes que su país firmaría finalmente el Tratado de Lisboa, que pretender renovar las instituciones de la UE y darle más peso internacional.

El presidente checo Vaclav Klaus anunció este martes que su país firmaría finalmente el Tratado de Lisboa, que pretender renovar las instituciones de la UE y darle más peso internacional, después de que el tribunal constitucional checo acabara con las últimas reticencias del único país que quedaba por firmar el famoso tratado.

Klaus ha sido el último mandatario europeo en ratificar el tratado y su firma, que se produce después de que el Tribunal Constitucional checo aprobara el pacto pese a las reticencias de los nacionalistas checos, significa en la práctica que la Unión Europea podrá escoger a su primer presidente a medio plazo, así como un nuevo representante para su política exterior, papel que hasta ahora había desempeñado el español Javier Solana.

 
Suecia, país que ocupa la presidencia semestral de la UE, se apresuró a emitir un comunicado nada más conocer la noticia en el que anunciaba que el Tratado de Lisboa entrará en vigor el próximo 1 de diciembre. El tratado pretende darle una mejor gobernabilidad a una UE cuyas instituciones se crearon para una docena de países, y no para los 27 actuales, así como un papel internacional más importante frente al ascenso de otras potencias como Rusia o China.
Klaus es un acérrimo euroescéptico que no ha dudado incluso en comparar a la UE con un estado totalitario, pero aceptó firmar el tratado presionado por el resto de 26 países de la UE y después de que el tribunal constitucional checo determinase este martes que el Tratado de Lisboa cumplía perfectamente con la constitución del país. Pese a ello, Klaus no dudó en anunciar que firmaba en contra de su propio deseo: «Esperaba la decisión judicial y la respecto, aunque discrepo fundamentalmente de su contenido», dijo a la prensa tras anunciar que había firmado el Tratado de Lisboa a las 15:00 hora central europea.

Los aliados nacionalistas de Klaus en el Senado de la República Checa habían presentado una demanda ante el alto tribunal acusando al tratado europeo de violar la soberanía nacional. Sin embargo el Constitucional anunciaba el martes su veredicto diciendo que rechazaba por unanimidad las alegaciones.

«Sin duda ahora es momento de que la Unión Europea siga adelante, hablando de los problemas vitales a los que nos enfrentamos todos», dijo el primer ministro británico Gordon Brown tras conocer la noticia.

Los líderes de la UE no lograron ponerse de acuerdo la semana pasada en Bruselas sobre quién debe asumir el nuevo cargo de presidente de la UE, cuyos poderes aún están poco claros. Tras quedar prácticamente descartado Tony Blair, y a falta de un mayor consenso sobre la idea de que el primer presidente de la UE sea una mujer, los posibles candidatos son el primer ministro holandés Jan Peter Balkenende, el ex primer ministro finlandés Paavo Lipponen, y el primer ministro de Luxemburgo Jean-Claude Juncker.