Atatürk, el hombre que forjó la historia moderna de Turquía

Mustafa Kemal Atatürk nació en 1881 en Tesalónica (Grecia), por entonces parte del Imperio Otomano. Lideró a los turcos en la Guerra de Independencia e introdujo las reformas que modernizaron Turquía.

Turquía recuerda este 10 de noviembre el 77º aniversario del fallecimiento del primer presidente y fundador de la moderna República Turca, Mustafa Kemal “Atatürk”, con ceremonias que se celebrarán a lo largo y ancho de todo el país.

Los principales actos tendrán lugar en el mausoleo que alberga la tumba del que en Turquía es considerado como “padre de la patria”, en Anıtkabir, donde se espera que acudan decenas de miles de personas y que permanecerá abierto hasta las 18:30 horas con motivo de este día.

Uno de los momentos más emotivos no obstante es el que se produce cada año a las 9:05 de la mañana, cuando las sirenas de todo el país suenan al unísono, todo el tráfico se detiene, los conductores hacen sonar sus sirenas, y los ciudadanos de toda Turquía permanecen en pie y en silencio durante dos minutos coincidiendo con la hora exacta en la que falleció Atatürk. Las banderas en todo el país también ondean en esta jornada a media asta, permaneciendo así hasta la puesta del sol.

En Estambul, habrá una ceremonia en el Palacio Dolmabahçe, a orillas del Bósforo, donde Atatürk pasó los últimos días de su vida, mientras que en la famosa Plaza Taksim se depositarán coronas de flores ante su estatua. En el lado asiático de la ciudad hay también previsto un evento para el martes que consistirá en formar una cadena humana en homenaje a Atatürk, mientras que miembros de la Asociación de Coches Clásicos de Estambul recorrerán toda la ciudad con 77 vehículos –los mismos que años se conmemoran de su muerte- y vistiendo máscaras con su rostro.

Un hombre que forjó la historia moderna de Turquía

Mustafa Kemal Atatürk nació en 1881 en Tesalónica (Grecia), por entonces parte del Imperio Otomano. Se ganó su fama como comandante exitoso durante las guerras balcánicas y en la I Guerra Mundial, donde en 1915 lideró las fuerzas otomanas que reprimieron la invasión de Galípoli –Çanakkale para los turcos- por parte de las fuerzas aliadas, que pretendían tomar por tierra la capital del imperio, Estambul.

Tras la derrota final otomana en la I Guerra Mundial y el colapso del imperio, Mustafa Kemal (años más tarde recibiría el apellido de Atatürk, “Padre Turco”) lideró la resistencia de los turcos en la Guerra de la Independencia Turca (Türk Kurtuluş Sabaşı) contra la ocupación extranjera de Estambul y la invasión griega de Anatolia.

Atatürk evitó así que se hiciera realidad la “balcanización de Anatolia”, que tras el final de la “Gran Guerra” había sido fijada para su partición y división entre las principales potencias europeas de acuerdo al Tratado de Sèvres (1920), firmado por el débil Sultán Mehmet VI tras la derrota del Imperio Otomano; dicho tratado se limitaba a dejar una estrecha franja de territorio en el centro de Anatolia para los turcos, mientras el resto se repartía entre zonas de influencia de varias naciones europeas o entre nuevos Estados creados al amparo de Francia, Reino Unido o Estados Unidos.

Con la victoria turca en la Guerra de Independencia y la firma del nuevo Tratado de Lausana (24 de julio de 1923), Atatürk estableció las bases para la fundación de la moderna República de Turquía (proclamada el 29 de octubre de 1923), iniciando un ambicioso programa de modernización del país y de reformas políticas, económicas y culturales.

Dichas reformas incluyeron la abolición del Califato, el traslado de la capital de Estambul a Ankara, el establecimiento de un estado firmemente basado en la democracia y el laicismo, la sustitución del alfabeto árabe por el latino, la emancipación de las mujeres (que obtuvieron el derecho al voto y al divorcio décadas antes que muchos países europeos), la abolición de las escuelas religiosas o la adopción del calendario occidental, entre otras muchas reformas.

Atatürk finalmente fallecería el 10 de noviembre de 1938 a los 57 años de edad en el Palacio de Dolmabahçe (situado a orillas del Estrecho del Bósforo, en Estambul). Su cuerpo sería enterrado con una gran ceremonia en su actual emplazamiento en Anıtkabir el 10 de noviembre de 1953.