Un tribunal de Bélgica sentencia a una terrorista turca a 15 años de prisión

Fehriye Erdal, cuya extradición Turquía lleva solicitando a Bélgica desde hace años por el asesinato en 1996 del empresario turco Özdemir Sabancı, fue condenada in absentia dado que permanece huida de la justicia belga desde 2006.

Un tribunal belga condenó el lunes in absentia a Fehriye Erdal, militante de la organización terrorista de extrema izquierda Frente-Partido Revolucionario para la Liberación del Pueblo (DHKP-C, por sus siglas en turco) a 15 años de prisión y a privarla durante 10 años de sus derechos políticos y civiles, por el asesinato en 1996 de un conocido empresario turco.

El juicio ante la Corte de Crímenes Graves de Brujas se desarrolló sin la presencia de Erdal, que se encuentra en búsqueda y captura desde que en 2006 eludiera su arresto domiciliario, y para la que la fiscalía había pedido inicialmente 30 años de prisión y otros 15 años de vigilancia. Varios simpatizantes del DHKP-C que esperaban a la salida del tribunal reaccionaron tras conocer la sentencia gritando consignas a favor de la organización.

Fehriye Erdal está considerada como una de las implicadas en el asesinato el 9 de enero de 1996 del ex directivo del holding turco Sabancı, Özdemir Sabancı; tras ser contratada como empleada de mantenimiento, Erdal ayudó a otros dos militantes del DHKP-C, İsmail Akkol y Mustafa Duyar, a entrar en las Torres Sabancı de Estambul para matar a Özdemir Sabancı, además de a su secretaria Nilgün Hasefe y al director general de ToyotaSA (un consorcio entre Toyota y Sabancı) Haluk Görgün.

Tras los asesinatos, que conmocionaron a la sociedad y al mundo empresarial de Turquía, Erdal huyó primero a Grecia oculta en un camión y posteriormente a Bélgica, donde sería apresada en 1999 con un pasaporte falso después de que el piso donde vivía sufriese un incendio; sin embargo tras ser juzgada y pasar sólo un año en prisión, fue puesta en libertad pese a una orden de extradición emitida por Turquía y puesta bajo arresto domiciliario, del que huyó en 2006. Actualmente se desconoce su paradero.

En 2007, ya huida de la justicia, un tribunal belga dictaminó que fuese procesada por sus crímenes en Turquía, aunque la orden fue posteriormente apelada y anulada. Finalmente el juicio se reanudó gracias a una demanda interpuesta por la familia Sabancı.

Otro de los implicados en los asesinatos, İsmail Akkol, fue juzgado en Grecia pero también puesto en libertad posteriormente, hasta que después de 20 años huido fue detenido en febrero de 2016 en Turquía cuando intentaba entrar ilegalmente en el país. Por su parte Mustafa Duyar, el único militante del DHKP-C condenado hasta ahora por el crimen, murió asesinado en prisión en 1999 cumpliendo cadena perpetua.

Bélgica ha sido durante años un quebradero de cabeza para las autoridades turcas por su reticencia tanto a extraditar a miembros de organizaciones terroristas que operan en Turquía como a vigilar o impedir sus actividades en el país; tal es el caso del DHKP-C o también del PKK (Partido de los Trabajadores del Kurdistán), reconocido como un grupo terrorista por la propia Unión Europea.