Seis rabinos judíos visitaron la mezquita de Cisjordania quemada por extremistas colonos en un intento de aliviar las tensiones tras el suceso, y llevaron 20 nuevos ejemplares del Corán.
Seis rabinos judíos visitaron el miércoles la mezquita de Cisjordania quemada por extremistas colonos el lunes en un intento de aliviar las tensiones tras el suceso, y llevaron 20 nuevos ejemplares del Corán para sustituir los que fueron destruídos durante el incendio.
Los residentes palestinos de la aldea de Beit Fajjar, donde tuvo lugar el suceso, mostraron durante la visita de los rabinos los restos de las páginas calcinadas de varios ejemplares del Corán así como las pintadas que dejaron los asaltantes, en las que podía leerse la palabra «venganza» escrita en hebreo. Los rabinos mostraron su condena al suceso y afirmaron que quienes habían cometido esta barbarie «se oponen a la paz».
El gobierno israelí se apresuró a condenar el suceso, que fue criticado por responsables de Naciones Unidas y se produce precisamente cuando israelíes y palestinos tratan de salvar las negociaciones de paz, muy tocadas tras la reanudación de la construcción de asentamientos judíos en Cisjordania.
Los habitantes de la aldea, situada cerca de la ciudad de Hebrón, creen que los atacantes eran colonos judíos. Las sospechas se centran ahora mismo sobre un grupo de judíos extremistas que ya en el pasado ha destruido propiedades de los palestinos en represalia por el congelamiento de las construcciones en los asentamientos judíos en Cisjordania.
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