LOS LÍDERES DEL EUROGRUPO PEFILAN UN PLAN CONJUNTA CONTRA LA CRISIS

Los jefes de Estado y de gobierno del Eurogrupo perfilaban este domingo, durante una cumbre extraordinaria en París, un plan conjunto contra la crisis financiera que según un borrador prevé garantizar la refinanciación de los bancos hasta finales de 2009 y evitar su quiebra.

Según un proyecto de declaración al que tuvo acceso la AFP, los 15 Estados miembros de la Eurozona se comprometerán a \»evitar la quiebra de cualquier institución importante para el sistema\», recurriendo incluso a recapitalizaciones, y garantizarán las operaciones de refinanciación de los bancos hasta el 31 de diciembre de 2009. Según el borrador, \»el plan (de garantía) contará con un monto limitado, será temporal y se aplicará bajo la estrecha vigilancia de las autoridades financieras\».

Los jefes de Estado y de gobierno de la Eurozona se reunieron en la sede de la presidencia francesa, el palacio del Elíseo, desde las 17H15, por invitación del presidente francés y presidente de turno de la UE, Nicolas Sarkozy. El presidente del Banco Central Europeo, Jean-Claude Trichet, el de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, y el del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, participaban en las discusiones.

El objetivo es poder anunciar medidas suficientemente fuertes para impedir que las bolsas se vuelvan a hundir en la apertura del lunes, tras conocer la peor semana de su historia. \»Espero un plan ambicioso, coordinado, que aporte soluciones\», declaró Sarkozy, poco antes de la reunión.

En las medidas previstas por el borrador de declaración, los dirigentes de la zona euro parecían inspirarse en Gran Bretaña, que no participa de la moneda común. El plan británico, que aúna nacionalizaciones parciales, garantías de préstamos interbancarios e inyecciones de liquidez, se presenta como el más completo.

El primer ministro británico, Gordon Brown, fue recibido por Sarkozy en el Elíseo, durante una hora, antes de la reunión del Eurogrupo. Luego presentó su plan durante media hora a los quince dirigentes de la Eurozona. \»Creo que en los próximos días la confianza en el sistema bancario se restablecerá\», dijo Brown a la prensa, tras entrevistarse con sus homólogos europeos. \»Las decisiones que tomemos en los próximos días nos afectarán en los años venideros\», afirmó el primer ministro británico.

El plan de Londres consiste, a grandes líneas, en que el Banco de Inglaterra actúe enérgicamente engrasando el sistema con liquidez, mientras el Estado desbloquea 50.000 millones de libras (62.500 millones de euros) para entrar en el capital de los bancos más débiles. Además, el Estado movilizará 250.000 millones de libras (315.000 millones de euros) para avalar los préstamos interbancarios, atacando así el corazón del problema. Porque por miedo a las quiebras, los bancos temen prestarse dinero y prestárselo a las empresas y a los particulares, con lo que el conjunto de la economía se ve amenazado.

Tras fracasar la semana pasada la idea de un fondo europeo de rescate, los europeos parecen inclinarse por otras medidas contundentes, aunque aplicadas a nivel nacional.

La cumbre de este domingo es muy importante, máxime teniendo en cuenta que la reunión que los ministros de Finanzas de los siete países más industrializados del mundo mantuvieron en Washington este fin de semana se saldó con una declaración de principios, más que con un verdadero plan de acción. En el comunicado adoptado por el G7, se afirmaba que se haría lo posible para evitar las quiebras de bancos y desbloquear los conductos del crédito.